Alerta por termoeléctricas de Pilar: «Es una locura que estén en el medio de la población»

Conurbano Digital se aproximó a las centrales termoeléctricas que se instalaron en Pilar sobre la Ruta 25, las cuales cuentan con una resistencia unánime de los vecinos de la zona, quienes están tratando por todos los medios de que no puedan funcionar. En diálogo exclusivo, explicaron los perjuicios que las plantas denominadas APR y Araucaria pueden traer para quienes viven en la zona.

«La demanda la presentamos esta semana, el juez se expidió y dictó la suspensión de APR», comentó Silvina, una de las habitantes del lugar, quien explicó que ambas plantas «son mellizas, pero instaladas con leyes diferentes», con lo cual disponen de sentencias por separado.

«Tienen 48 horas para presentar la apelación y 15 días más para mostrar los impactos, por su parte, Araucaria aún sigue en construcción y de la misma manera la van a demandar», indicó.

Andrea, otra de las vecinas, que además es médica, explicó que estas centrales pueden traer «perjuicios por contaminación aérea y también sonora». «Los cuadros que se producen son a nivel respiratorio tanto en vía superior como nariz, ojos y boca», señaló. «Esto se da en poblaciones susceptibles, es decir, aquellas personas con antecedentes como asma o enfermedades cardiovasculares, aunque también se da por grupo etario, sobre todo en niños y ancianos», agregó.

En relación a la contaminación auditiva, la facultativa hizo hincapié en las turbinas que poseen las termoeléctricas. «Va a generar un montón de ruido. Son 14 entre las dos empresas», dijo y remarcó que ambas presentaron su impacto ambiental por separado, con lo cual no se sabe a ciencia cierta cómo afectarán en conjunto. «Es una locura que estén en el medio de la población», subrayó.

«Somos cada vez más, la gente se va enterando de a poco y se va sumando, el otro día en la marcha fuimos más de mil personas. Nuestro objetivo es simple, esto no puede estar acá, por sentido común te das cuenta que esto no pertenece a este lugar», manifestó Diego, otro de los vecinos del lugar. «Más del 80 por ciento de la gente de esta zona no tiene agua de red y esto va a impactar contra los recursos hídricos», añadió.

«Otra de las pruebas de que esto no está calculado es que en julio hicieron el cambio de zonificación apurados», dijo Marcela, también vecina del predio, en relación a la conversión del lugar, que dejó de ser zona urbana.

Por otra parte, los vecinos contaron que no tienen respuesta por parte del Municipio de Pilar. «Te cajonean el pedido, no te lo dan», aseguró Silvina, quien además remarcó que a pocos metros del lugar se ubica una escuela y a menos de un kilómetro está el centro de la localidad de Matheu, perteneciente al partido de Escobar. «Ellos saben qué grado de afectación tiene y así y todo no importa», indicó otra vecina.

También se hicieron eco de las palabras del intendente de Pilar, Nicolás Ducoté, quien hace pocos días dijo que «se necesita contaminar a 10 mil personas para darle luz a 150 mil». «Perjudicaría a 65 mil, que es un número bastante mayor, pero si solo afectara a esa cifra, de todos modos es un espanto», finalizó Marcela.

Compartir