Asesinan a un joven en la noche de Hurlingham, y detienen a los autores del hecho gracias a las cámaras del Municipio

Ocurrió esta madrugada en el estacionamiento de un local de comidas rápidas ubicado en avenida Jauretche al 900, cuando una pelea en el interior de un local bailable terminó en la calle con un joven apuñalado. Las cámaras del Municipio de Hurlingham permitieron la detención de los presuntos asesinos.

Fue alrededor de las 7 de la mañana cuando la Policía toma conocimiento que, luego de una pelea que quedó captada por las cámaras de seguridad de la Municipalidad de Hurlingham, Facundo Espindola, de 24 años, vecino del partido de Tres de Febrero, murió tras recibir una herida de arma blanca en el tórax.

Tras un relevamiento del Centro Integral de Prevención de la Secretaría de Seguridad del Municipio, se da alerta de vehículo marca Peugeot 308 color blanco con dos ocupantes quienes se dan a la fuga del lugar del hecho.

Una patrulla interceptó al vehículo en fuga en las calles Vergara y Azurduy, de Villa Tesei, y logró la aprehensión de los ocupantes, de 26 y 28 años respectivamente, uno de ellos de nacionalidad paraguaya.

Trascendió que el joven fallecido era futbolista, y llegó a desempeñarse como arquero del club Almagro. Curiosamente, uno de los detenidos también es futbolista, y actualmente pertenece al plantel del club San Telmo. Se trata de Nahuel Alejandro Oviedo Betancourt, de 28 años, quien es delantero de la entidad que anima el ascenso argentino.

El presunto autor del hecho comenzó su carrera en Huracán, en el 2010, cuando el equipo estaba en primera división. Más tarde, en 2014 pasó a Sportivo Italiano y en 2015 a San Antonio Unido de Chile. Luego, jugó en Deportes La Serena, también de Chile, y previamente defendió los colores de San Telmo. Ya en 2017 fichó para Sportivo Barracas, para luego volver al Candombero.

No solo tiene antecedentes profesionales, también tiene un historial con la ley, ya que el delantero acusado de homicidio ya había estado detenido. Primero, en 2011, fue condenado a tres años de prisión en suspenso por robar joyas en una casa del barrio porteño de Villa Devoto, hecho por el que reconoció su culpabilidad. Luego, estuvo tres meses alojado en el penal de Ezeiza señalado como autor del ataque a una mujer policía, aunque en este caso dijo que se trato de un error y que él no tuvo nada que ver.

Interviene en el hecho ocurrido en la noche de Hurlingham, la Unidad Funcional de Instrucción 8 de Morón, a cargo de Adriana Suarez Corripio, la que dispuso pericias, autopsia, y demás medidas de rigor.

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