Conmoción en Zárate: Una discusión entre vecinos terminó con uno de ellos asesinando de un disparo a otro

El agresor escapó tras el ataque, pero se entregó minutos después. La víctima, un joven de 28 años, murió en el lugar mientras era asistido.

Conmoción total en la ciudad de Zárate tras el asesinato de un chico de 28 años. La víctima discutía con sus agresores, padre e hijo, y el mayor de ellos le disparó reiteradas veces para luego darse a la fuga. El homicida se entregó a la Policía horas después, y su hijo fue apresado cuando se refugiaba en el domicilio de un familiar.

Todo ocurrió este sábado al mediodía en la esquina de Belgrano y Máximo Paz. Hasta allí llegaron Miguel Ángel Pereyra, conocido en Zárate por su oficio de carnicero, y su hijo, Julián Pereyra, a bordo de un Volkswagen Golf.

Por causas que aún investigan, el hombre de mayor edad empezó a discutir con la víctima, identificada como Franco Russo, pero la pelea escaló y terminaron a las trompadas.

Luego, todo se salió de control, y el mayor de los Pereyra sacó el arma que tenía en su poder y le disparó a Russo.

Esta secuencia quedó registrada por una cámara de video, que muestra como, tras herir de muerte a Franco Russo, sus agresores escapan y un vecino trata de detenerlos arrojándoles un objeto contundente en la luneta del Volkswagen Golf, provocando que la misma se destruya.

Vecinos que escucharon la discusión asistieron a Russo malherido en la calle, pero ya era tarde.

Según fuentes policiales, las cámaras de seguridad del Municipio de Zárate captaron al asesino y su hijo huyendo por la Ruta 193, justo antes de subirse a la autopista Panamericana, en dirección a la Ciudad de Buenos Aires. Horas después, Miguel Ángel Pereyra se entregó en la comisaría primera, mientras que el menor de los agresores fue detenido por la Delegación Departamental de Investigaciones de Zárate de la Policía bonaerense en el domicilio de un pariente.

Si bien en un primer momento se informó que todo estaría enmarcado en una discusión de tránsito, la Justicia investiga la pista vinculada a los problemas convivenciales que la novia de del vecino ultimado tenía con Julián Pereyra, ya que eran vecinos.

Lleva adelante la causa la fiscal Andrea Palacios, de la Unidad Funcional de Instrucción 7, quien imputó a padre e hijo por el delito de del homicidio agravado por el uso de arma. La funcionaria judicial plantea tomarle declaración a la novia de la víctima, a quien considera una una testigo crucial para la causa. De momento, los dos detenidos por el hecho se han negado a declarar.

Compartir