“En la comunicación de crisis, que es como se llama cuando un gobierno debe explicar sus propios errores, el de Mauricio Macri tiene una asignatura pendiente», dice Diego Dieguez Ontiveros, uno de los miembros del Comité Organizador de la Cumbre Mundial de Comunicación Política, que recientemente se realizó en Capital Federal.
Para el abogado y ex asesor de Daniel Ivoskus, en el Municipio de San Martín, «decir que el gobierno comunica mal es poner un manto de piedad sobre sus errores de gestión». En ese sentido, remarca sus diferencias con la fuerte similitud de la comunicación al estilo de la campaña norteamericana, que suele llevar adelante Cambiemos, «porque lo importante de verdad es la gestión, la política, y la comunicación tiene que venir después”. “Si solo hay comunicación, se produce un vacío de significados», asegura en diálogo con Crónica, aunque destaca la política de datos abiertos impulsada por Mauricio Macri. «Eso facilita primero el control de la gestión, pero también permite que el ciudadano pueda observar los procesos y evaluar el esquema de toma de decisiones y, al sentirse parte, es mucho más participativo», agrega.
Precisamente, Ontiveros considera que la reforma política que pronto comenzará a debatirse en el Congreso (con límites a reelecciones, voto electrónico y otros cambios) es «una buena forma de sincerar una serie de problemas que tiene nuestra democracia y buscarle soluciones».
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