El intendente de Malvinas Argentinas recorrió las obras de restauración y modernización de este centro de salud mental ubicado en Los Polvorines. Es el único de este tipo en la región por prestar todos los servicios que hacen a la atención psiquiátrica.
El intendente de Malvinas Argentinas, Leonardo Nardini, anunció la culminación de una extensa obra de restauración y modernización en el histórico Hospital Carrillo, especializado en salud mental, de Los Polvorines, luego de diez años sin sufrir ni una sola modificación.
El jefe comunal destacó la importancia de tener este nosocomio único en la región por ser público y prestar todos los servicios que hacen a la atención de patologías psiquiátricas. «La demanda del corredor norte va aumentando día a día y nosotros somos un soporte importantísimo en lo que respecta a salud mental», sostuvo.
Además, puntualizó que «estamos convencidos de que este es el camino y así lo venimos desarrollando”. “Acá tenemos un equipo médico que trabaja muchísimo para poder ampliar las prestaciones y así llegar cada vez a más vecinos que sufren este tipo de problemáticas, que son reales, que son concretas, y lo importante es que estamos trabajando para que ellos las puedan solucionar», remarcó.
Respecto a las refacciones y los trabajos que estuvieron a cargo de la Secretaría de Obras Públicas y Planificación Urbana, Leo Nardini comentó que «se fueron haciendo siempre con la sugerencia de nuestros profesionales del hospital, ya sea para agrandar espacios o para ir recuperando lugares que estaban en muy mal estado».
Los trabajos constaron de construcción de mejores pabellones de internación, baños nuevos, trabajos de pintura en el interior y el exterior del edificio, la creación de cinco consultorios, una nueva rampa de acceso para personas con dificultad motriz y la instalación de aires acondicionados en todas las áreas del hospital.
El doctor Ernesto González, médico psiquiatra y actual director del hospital, comentó que el primer día que llegó a sus funciones lo primero que observó «con mucha tristeza» fue un hospital sumamente abandonado y deteriorado. «Hoy con alegría y sintiéndome parte de este proceso, hemos logrado hacer del Carrillo un hospital accesible, moderno, digno para los pacientes y también digno para los trabajadores», subrayó. «Esto nos enorgullece a todos, y digo a todos porque acá hemos trabajado desde el primero hasta el último», finalizó.
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