Los rastreros creyeron que se trata de un blanco fácil, pero no fue así. La víctima, rápida de reflejos, los ahuyentó a balazos. Los delincuentes terminaron heridos y debieron recurrir al hospital, donde los detuvieron.
Ocurrió el miércoles pasadas las 15 horas en la esquina de Manuel Savio y Bradley, en Quilmes Oeste. La mujer, que se desempeña en el Comando de Patrullas distrital, en franco de servicio, fue abordada por 2 motochorros armados.
En una rápida acción, la agente desenfundó su arma calibre 9 milímetros reglamentaria y efectuó 3 disparos, repeliendo el intento de ataque de los masculinos.
Como consecuencia, horas después del hecho, uno de los rastreros, de 18 años, acudió al hospital con herida de arma de fuego en la axila y en el pie, mientras que su cómplice, de 19 años, también acudió a un centro hospitalario, en su caso en Almirante Brown, con un balazo en el brazo.
La victima resultó ilesa y no habrá proceso en su contra, ya que la fiscalía interviniente entendió que actuó en legítima defensa, por lo que no tomó temperamento alguno contra ella.
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