Yanina Miranda, de 35 años, discutió con su concubino en su casa y éste la roció con alcohol y le prendió fuego. Estuvo internada en el Hospital Erill. El jefe comunal del distrito reclamó justicia y llamó a “redoblar esfuerzos para obtener la plena igualdad de derechos entre mujeres y hombres”.
Una mujer de 35 años, que permanecía internada en grave estado desde el domingo último a raíz de las quemaduras sufridas tras ser rociada con alcohol y prendida fuego durante una discusión en una casa del partido bonaerense de Escobar, murió en las últimas horas en un hospital local, informaron ayer fuentes judiciales.
Se trata de Yanina Miranda, cuya familia, al igual que la fiscalía que lleva adelante la investigación, pidieron la detención del concubino de la mujer como presunto responsable del femicidio.
Fuentes judiciales informaron a Télam que la mujer permanecía internada en la terapia intensiva del Hospital Erill de Escobar, en el noreste del Gran Buenos Aires, donde murió ayer a raíz de las quemaduras sufridas el domingo pasado.
Aquel día, la mujer se encontraba en su casa de la calle Florentino Ameghino al 100 de ese partido, cuando fue rociada con alcohol y prendida fuego durante una discusión.
Voceros policiales indicaron que los efectivos de la comisaría primera de Escobar se dirigieron hasta esa vivienda tras un llamado al número de emergencias 911 en el que se alertó sobre una pelea entre un hombre y una mujer.
Al arribar, los policías constataron que Yanina Miranda había resultado gravemente herida, por lo que fue trasladada al hospital zonal donde los médicos confirmaron que presentaba quemaduras en el 45 por ciento del cuerpo, en especial su cuello, la cara, el torso y los brazos.
Ante este cuadro, la mujer quedó internada en grave estado, aislada y entubada en el centro asistencial hasta que falleció ayer.
En un principio, la Policía aprehendió como principal sospechoso al concubino de la víctima, identificado como Juan Carlos Monjes, de 29, por el delito de «Tentativa de homicidio».
Por su parte, el fiscal de la causa, Christian Fabio, de la Unidad Funcional de Instrucción Especializada en Violencia de Género, Abuso Sexual y Delitos Intrafamiliares de Escobar, pidió el jueves último la conversión de la aprehensión en detención pero el juez Luciano Marino denegó el requerimiento por falta de pruebas y el sospechoso fue excarcelado.
De acuerdo a las fuentes, los investigadores tuvieron en cuenta el testimonio de la hija de 15 años de la víctima, quien al momento de la pelea estaba en su habitación y escuchó un «fogonazo».
Mientras que otros familiares de la mujer aseguraron que esta sufría violencia de género por parte de su concubino, pero nunca llegó a denunciarlo por «miedo», detallaron los informantes.
En tanto, el fiscal buscaba ayer nuevos elementos para realizar en las próximas horas otro pedido de detención del presunto autor del hecho, pero por el delito de «Homicidio agravado». Además, el instructor judicial aguarda el resultado preliminar de la autopsia al cadáver de Yanina, al tiempo que ordenó realizar una autopsia psicológica para determinar el contexto en el que ocurrió su muerte.
«Yanina somos todos»
Por otro lado, Ariel Sujarchuk, intendente de Escobar, publicó en su página de Facebook una nota titulada «Yanina somos todos» en la cual expresó el «repudio y rechazo a todo tipo de violencia de género». «Quiero expresar primero mi abrazo solidario a su familia y el profundo repudio y rechazo a todo tipo de violencia de género, mucho más cuando termina en crímenes horrendos como este», escribió.
El jefe comunal aseguró que «cuando hay violencia de cualquier tipo, aún sin llegar a situaciones tan extremas, siempre hay dos responsables, primero el autor de hecho, segundo la sociedad que mira para otro lado».
«Acompañamos sinceramente a la familia en este duro momento. Queremos saber la verdad y reclamamos justicia», señaló el intendente tras explicar que hace dos años abrió una «Casa de Abrigo para contener a las víctimas de violencia», aunque aclaró que «aún así muchas no saben de su existencia y otras no se animan a denunciar».
«Esto nos obliga y compromete a redoblar esfuerzos para obtener la plena igualdad de derechos entre mujeres y hombres (…). Necesitamos un Estado nacional presente, una Justicia que garantice derechos y una sociedad unida que acompañe cotidianamente este proceso», concluyó Ariel Sujarchuk.
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